A muchos fotógrafos les agrada animar sus fotos. Sin embargo no cualquier toma puede salir airosa del pasaje desde su estado natural hasta convertirse en un .gif. Veamos cómo elegir las fotos más aptas y también algunos ejemplos.
Lo primero que voy a recomendar es el uso de un trípode, de modo de mantener la cámara bien fija, es decir, inmóvil.
También podrás usar un cable de disparo remoto y si se trata de un auto retrato se recomienda el uso de un TIMER, pues a nadie la agrada ver tu cámara en al espejo. La mayoría de las cámaras actuales ofrece esta posibilidad. Así que a establecer un tiempo, colocar la cámara en un lugar seguro y ¡a posar!
Unas de las mejores fotos para animar son los primeros planos: ojos, flores, joyas son las más comunes pero estoy segura de que podrás desarrollar tus propias ideas. Pero recuerda: para realizar estos acercamientos, acercarse físicamente no es lo más recomendable sino que lo mejor es usar un ZOOM.
Por último, si la foto tiene zonas brillantes y zonas oscuras intenta ajustar el color de modo que se la vea mejor antes de ser animada. Casi todos los programas tienen una opción llamada EQUALIZE para mezclar los colores de manera correcta y agradable para la foto en cuestión.
Esto es todo por hoy. ¡Espero comentarios y enlaces a tus fotos animadas!
